viernes, 30 de noviembre de 2018

El Hospital de Barbastro y los concejales y alcaldes de sus municipios cercanos




Me he propuesto escribir unas líneas sobre el Hospital de Barbastro. Cuando a un servidor en su día le salvaron la vida en dicho hospital, lo primero y antes de entrar en materia, es ser agradecido. Tengo de la plantilla del Hospital la mejor de mis opiniones, desde la competencia de sus médicos, pasando por la humanidad, cariño y profesionalidad de sus enfermeras, hasta llegar al último celador. Y me duele, cuando parece que el “ deporte” comarcal es hablar mal del hospital, criticando a su plantilla. 

Las pocas veces que he debido utilizar sus servicios, después de aquel episodio trágico que tuve que pasar, me han servido para ratificarme en la excelencia de una plantilla laboral, que como todos sabemos hoy vive agobiada por la saturación de la asistencia que presta y la falta de recursos de los que dispone.

No dispongo de estadísticas recientes, pero ya en 2008 por CCOO se denunció, que con una población asistencial similar a la que presta el Hospital de San Jorge en Huesca, el de Barbastro dispone poco menos de la mitad de médicos en las diferentes especialidades y un déficit importante en enfermería.

En el momento presente- como les digo- tengo la sensación que de aquellas debilidades estructurales no han sido subsanadas, y cualquiera que utilice los servicios del Hospital puede darse cuenta de que este se encuentra en un momento muy cercando al colapso. Los retrasos y lista de espera son cada más extensos y ya no quiero pensar qué puede llegar a suceder si en nuestras comarcas entra en funcionamiento el nuevo matadero municipal, próximo a instalarse en Binéfar. Entre puestos directos e indirectos de trabajo, según informa la prensa, podría la zona oriental de la provincia ver aumentada su población en varios miles de personas.

Por otra parte, veo con preocupación que nuestra narcotiza población no es consciente de la que se le viene encima en orden a la primera de sus prioridades, como es la salud. Ahora bien, lo que me indigna por parte de los que lo saben perfectamente, es la actitud de los alcaldes y ediles de los pueblos cuyos vecinos utilizan habitualmente el hospital. Del baturro Lamban- esa desgracia aparecida por nuestras tierra- mejor no comentar nada. El asunto al parecer le debe traer al pairo, tan ocupado como anda a diario en criticar a los catalanes y hacer todo lo posible por empeorar nuestra histórica relación con nuestros vecinos. 

Hace ya mucho tiempo- demasiado- que la gran mayoría de nuestros munícipes, llegaron a nuestros ciudades para gestionar, como dicen ellos, pero no para transformar. La estrategia es muy simple : se trata de no hacer ruido, rendir cada uno de ellos pleitesía al poder de las cúpulas de sus partidos, que son quienes hacen las listas, es decir, los que garantizan su futuro empleo y remuneración, y narcotizar más a sus vecinos con un “ pan y circo” creciente.

Ya se sabe que el que crea o denuncia problemas no está bien visto. Y hoy por hoy- como ocurriera con los gobernadores franquistas- el mejor alcalde o edil, es aquel que mantiene a su rebaño en paz con el poder, y de paso, pastorea debidamente a sus vecinos para que en la próximas elecciones el partido político de turno obtenga en la circunscripción abundantes votos.

Si nuestro alcalde o edil cumple estos principios a rajatabla, casi seguro que además de perpetuarse en las listas, que hacen los correspondientes comités provinciales, todos en Huesca capital, puede tener una carrera por delante en ascensos a diputado provincial o con suerte autonómico. A ver quién se la juega con esta tropa. En resumen : “digo que represento a mis vecinos, pero en realidad estoy aquí para cuidar de mis intereses”. A esto hemos llegado, si bien es justo hacer alguna excepción como la de algún alcalde, de todos conocido, que recientemente se ha atrevido a plantar cara, en otro orden de cosas, al baturro Lambán. Se agradece porque no es lo habitual.

No sé, pero me da la sensación que, después de unos años narcotizados, todo está a punto de estallar. Y ya falta poco para que los vecinos de esta zona oriental tomen conciencia, porque el bloqueo sanitario está cerca. Será entonces cuando se decidan a exigir a sus munícipes el adoptar decisiones en defensa de sus intereses. Veremos quién da la talla.

Estoy plenamente convencido de que con una actuación coordinada y firme de todos los ayuntamientos del ámbito territorial del Hospital de Barbastro, en muy poco tiempo la solución se encontraría cercana.

domingo, 25 de noviembre de 2018

Las 12 quiebras de España



Bacarrota, quiebra, suspensión de pagos o como  lo quieran llamar, el caso es que España siempre fue líder en estos procesos. El estado, acuciado por la deudas, debió de dejar de pagar a sus acreedores nada más y nada menos que en 12 ocasiones a lo largo de su historia. Y eso que los políticos, sobre todo los de PP, repiten como papagayos que somos " una gran país",

Gobernados por élites extractivas, por no decir ladronas, verdaderas enemigas del pueblo y acampadas en el Estado como un cortijo a su servicio, cada cierto tiempo quiebran al Estado, cuando ya no pueden robar más a su propio pueblo.

Con Felipe II y sus innumerables guerras en Europa, vino la primera quiebra, si bien ya su padre Carlos I le dejó las finanzas temblando. En el capítulo de los Austrias, le siguió Felipe III, que no quiso ser menos. Su heredero Felipe IV, la verdad, puso el listón mucho más alto, y en su reinado nada más y nada menos quebró al Estado cuatro veces consecutivas,

Hay que reconocer que en el capítulo de los ladrones éste fue el más original. Ciculaban monedas de aleación de oro y plata mezcladas con bronce, y con la excusa de acuñarlas de nuevo hubo de retirarlas. Pero cada vez que la moneda volvía al mercado con el nuevo cuño, llevada menos oro y plata, y más bronce, hasta que las dejo desnudas de los metales preciosos. Con esta maniobra pudo pagar mal que bien a sus acreedores y le dejó al pueblo una inflación galopante.

Carlos II, el último austria, hizo lo propio, y con la llegada de los borbones, los reinados de Carlos IV, Fernando VII e Isabel II volvimos a quebrar. Esta última,  llevo a la quiebra al estado gracias a un monumental plan de ferrocarriles, que fueron diseñados para las líneas menos productivas, aunque eso si, la oligarquía que los construyó se forró a base de comisiones, latrocinios y sobreprecios. Vamos, lo mismo que se ha hecho con el actual AVE y los aeropuertos sin aviones en estos momentos. ¿ Les suena, verdad ? 

La última de todas, la protagonizó el General Franco, ese portento de estadista, que estos días muchas personas están a punto de canonizarlo. El " salvador" de España, se negó a pagar la deuda de la República española, que por lo visto no era Estado según sus opiniones, como tampoco eran españoles los presos en la II guerra mundial que ingresaron el campo de exterminio de Mathausen. Consultado el dictador por estos españoles capturados en Francia por los ejércitos de la Wermacht, contestó a Hitler, que " hiciera lo que quisiera, pues estos sujetos no  eran españoles".

En diciembre el BCE deja de comprarnos deuda a baratos , por no decir,  regalados intereses y la hucha de las pensiones, ya ha sido esquilmada casi del todo. Veremos lo que ocurre, porque las estructuras de un Estado ineficaz y al servicio de los ladrones no ha cambiado. Las pocas veces que quisimos crear un estado moderno y justo, las oligarquías de las Españas, que hoy todavía siguen al frente del cortijo lo impidieron. Me refiero al Trienio Liberal con Riego, la I y II repúblicas.

A la menor ventolera de las finanzas internacionales el edificio, podrido por siglos de atraso, reacción y latrocinio, se hundirá como un castillo de naipes. Y no falta mucho. No le doy al chiringuito más de 5  o 6 años.

martes, 20 de noviembre de 2018

Cosidó : todo un manipulador, si bien obscenamente sincero



 Les dejo esta tuit  de un tal Cosido, portavoz del PP en el Senado. Se refiere a la renovación pactada con el PSOE, de los puestos de vocales y Presidente del Consejo General del Poder Judicial.





"Con otras palabras, obtenemos el mismo numéricamente, pero ponemos un presidente excepcional, que fue vetado por Rubalcaba en 2013, y ahora no. Un presidente gran jurista con muchísima experiencia en el Supremo, que prestigiará el TS y el CGPJ, que falta le hace, y con una capacidad de liderazgo y autoritaslas  para que las votaciones no sean 11-10 sino cercanas al 21-0. y además controlando la sala segunda desde atrás y presidiendo la sala 61. Ha sido una jugada estupenda que he vivido desde de la primera línea. Nos jugábamos las renovaciones futuras de 2/3 del TS y cientos de nombramientos en el poder judicial, vitales para el PP y para el futuro de España."


Se trata de la mejor demostración de la politización de nuestra Justicia y el "pasteleo" de que es objeto en manos de los grandes partidos del régimen del 78. Sólo trepan en ella a las mas altas magistraturas, los más obedientes siervos del poder político. De ello se encargan los vocales y presidente del Consejo General del Poder Judicial.

No puede decirse que Cosido, un " pasteleador" más, al que como a todos los "pasteleadores"  que se les llena la boca con eso de la separación de poderes y el estado de derecho, no haya sido sincero. Lo podremos acusar de todo lo que ustedes quieran, pero nunca de hipócrita, porque sincero, la verdad, es un rato.

La Justicia- y ya ha llegado al gran público- se encuentra totalmente desprestigiada, y  no hay día que en Europa el Tribunal de Derechos Humanos no la desautorice o  se pronuncien sentencias en el Tribunal Supremo al dictado de los intereses oligarquicos, que a su vez  controlan mediante la "puerta giratoria" a los grandes partidos. 

En parte me alegro de que la degradación haya llegado a sus últimos extremos. Quiere esto decir, que ya le queda poca vida al sistema que la estructuró y al que tan fielmente sirve. Lo que venga dentro de un tiempo, cuando se hunda del todo, no puede ser peor de lo que actualmente disfrutamos. Y digo esto, porque con  el control político de los jueces, llevamos años promocionado  a los más obedientes, que muchas veces no suelen ser los mejores, ni los más virtuosos. Así ocurre que hoy en día y en muchos casos,  se detecte mucha mejor calidad jurídica en las sentencias dictadas por  los Juzgados inferiores que en los tribunales  superiores, y que,  por otra parte, sea habitual encontrarnos  en estos tribunales superiores, con interpretaciones forzadas de la Ley, retorciéndola, para satisfacer intereses políticos y económicos de unos cuantos, que no son la mayoría de los españoles.

Ya lo dice bien el tal Cosido: a través de Marchena vamos a  controlar  ( nosotros el PP) a la sala II del  Tribunal Supremo, es decir a la Sala de lo Penal que va a Juzgar el caso de los presos políticos catalanes, y a muchos  de los aforados- añado yo- que existen en España. Y además- sigue diciendo Cosido-  vamos a controlar a la Sala del 61, que es la llamada a ilegalizar a posibles partidos políticos.

Esta es la fotografía actual de eso que llaman Justicia.En el caso de los catalanes, ya me dirán  ustedes el juicio farsa que se les viene en encima.





miércoles, 7 de noviembre de 2018

¿ Lo quieren más claro ?

¿ Lo quieren más claro ? El que no quiera verlo a esta alturas, no es que sea tonto, es que es perfectamente conocedor de que esta falsa democracia le beneficia y los demás,  que son la mayoría, los perjudicados por tanta injusticia y desigualdad, le importan un comino. Ya lo dice el refranero  : " ande yo caliente ríase la gente".

Que en las alturas las togas ( tan serias y solemnes ellas) están al servicio de los poderosos, ya nadie lo discute. El espectáculo  que ha dado el Tribunal Supremo, con la sentencia de los gastos en la constitución de las hipotecas, ya no puede ser más bochornoso. Ya asomaron la " patita" con la sentencia sobre los cláusulas suelo- la que les tumbó el Tribunal de Justicia de la UE- y lo ha acabado de confirmar la sentencia del Tribunal Europeo de los Derechos Humanos con el caso Otegui. Los que vimos en  su día en televisión la actuación de la Presidente de la Sala de la Audiencia Nacional, que lo juzgo, ya sabíamos lo que iba a pasar. Sus comentarios, sus muecas, sus actitudes, desde el primer momento ya denotaron que se estaba juzgado al enemigo. Y ya se sabe, a éste " ni agua".  

Digámoslo claro : este Tribunal Supremo sobra, y la Audiencia Nacional, heredera del Tribunal de Orden Público de la dictadura, también. Y ahora, imagínense, el juicio que les espera a los presos políticos catalanes. Los tribunales de Europa rechazando las euroórdenes ( Bélgica, Suiza, Alemania, Inglaterrera) y ellos erre que erre con con del delito inventado de rebelión.

Va siendo hora de poner en cuestión todo el edificio : los parches ya no sirven. Un día comentaremos con más detalle, pero sirva de avance que ni el sistema de acceso a la carrera judicial es el adecuado, ni la designación de los jueces en las altas instancias puede seguir como hasta ahora. Y por supuesto, el bodrio de la Audiencia Nacional debe desparecer, pero desaparecer cuanto antes mejor.

Me olvidaba : Y  ya vale de que los jueces tengan autorizada- como muchos otros funcionarios, por ejemplo de la AEAT- la actividad de la  enseñanza. Por esa puerta,  se prepararan a opositores a los mismos cuerpos del Estado, se participa mediante colaboraciones en la redacción de libros de afamadas editoriales jurídicas y no faltan seminarios, ponencias, conferencias o cursos, muy bien pagados todos ellos, que organizan las entidades financieras con la excusa de mejorar los conocimientos de muchos profesionales  del derecho, consultores y economistas.

Si tanta vocación tienen por la enseñanza. Que sea en la Universidad pública exclusivamente, y con el modesto sueldo de un profesor asociado.

Y otra cosa más : el que tanta vocación política tenga y  deje el puesto de juez para estas tareas, que lo haga, pero que no vuelva nunca más a la carrera judicial.  Lo mismo digo, si pasa a ocupar una alta responsabilidad en multinacionales o empresas del IBEX 35.

sábado, 3 de noviembre de 2018

Tratan de aparentar, pero no pueden

Nuevamente nuestros partidos de derecha ( PP y CS) se han negado en el Congreso de los diputados a condenar a los movimientos de auge neofacista que como setas están surgiendo por toda Europa. Los condenaron en una misma e idéntica moción en el Parlamento europeo. Ya se sabe pues, en que qué consiste está democracia de fachada y opereta en la que vivimos. En el exterior necesitamos aparentar, no sea que desde Europa se acaben los fondos que cubren nuestro abultado déficit y endeudamiento;  pero amigo, a ver quién es el guapo que en casa le lleva la contraria a todo el franquismo que anida en las filas de estos partidos, que es  tanto como decir su clientela.

Lo mismo ocurre con el Estado de derecho ( su estado de derecho), que invoca toda esta derecha franquista a cualquier hora, cuando en realidad no lo hay ni lo ha habido nunca,  entre otras razones porque no existe la separación de poderes en nuestro país. Se cumplen  en el ámbito judicial, eso sí los requisitos formales, pero no los sustanciales. Ellos, o sea el fraquismo,  nos dejó un estado  prorrogado en la constitución de 1978, donde las decisiones judiciales trascendentes- esas que pueden llegar a  amenazar la hegemonía de sus  clases oligarquícas- están tomadas de antemano, muchos antes de los procesos farsa que suelen organizarse para disimular. Veáse sino la que se prepara con el juicio a los presos políticos catalanes,  donde las sentencias ya están prácticamente dictadas, o  bien la recientes medidas tomadas rápidamente  por el Tribunal Supremo para enmendar la decisión de su sección tercera de lo contencioso- administrativo que condenaba  inicialmente a  los bancos a correr de su cuenta con los impuestos derivados de  la concesión de hipotecas.

El mecanismo  de la apariencia es sencillo : el poder político, el de los grandes partidos, nombra a los jueces, y a su vez aquél es sostenido por los poderes económicos y mediáticos,  herederos de la dictadura, a través de la puerta giratoria y otras argucias.

Todo un gran teatro, que cada día queda más al descubierto.

Lo más gracioso, para haberse negado PP y CS a condenar a los neofascismos europeos, son los argumentos que dan a sus clientelas franquistas- bien pensionadas- para consumo de las mismas. Han puesto como excusa lo siguiente : " no podemos condenar al fascismo europeo, por que la moción tampoco condena al "fascismo comunista o rojo" y  por lo tanto no está equilibrada ".

El chiste de estos fariseos tiene su gracia por las siguientes razones:

1.- Fascismo no hay más que uno : el Fascio con Mussolini en Italia que fue su creador y el  nazismo en Alemania que acabó de perfeccionarlo, al que se unieron  sucesivos admiradores  de la idea, como Franco en España y Antonescu en Rumania.

Los dos primeros desencadenaron la II Guerra Mundial y de paso exterminaron a 6.000.000 de judíos y 2.000.000 millones más de gitanos de los que nadie se acuerda nunca.  Y puestos ya en faena se llevaron por delante todos los socialistas y comunistas que pudieron en su propios países y en los invadidos.

2.- Franquito y su clientela destacaron toda una división ( la división azul) para luchar en el frente ruso a favor de sus aliados fascistas, a los que por otra parte, dotaron de todo tipo de suministros. Un favor devuelto por su inestimable  apoyo  en la Guerra Civil española contra la República. Más de 50.000 italianos  ( aportes de armamento aparte) lucharon al lado de General Franco, así como 15.000 alemanes más, encuadrados en un cuerpo de aviación de bombardeo llamado la Legión Condor.

3.- Quien acabo precisamente con el fascismo fue el comunismo ruso, que llevo todo el peso de la guerra, con la ayuda de EEUU e Inglaterra. Desde las puertas de Moscú el mariscal Zukhov  en una enorme galopada entró el Berlín y acabo con la bestia.

Esta es la derecha que tenemos. Franco no ha muerto, es cierto que todo lo dejo " atado y bien atado".