La que faltaba

 

El BOE de 1 de febrero de este año a instancias de la Diputación Provincial de Huesca ha publicado la convocatoria de 10 plazas de auxiliares administrativos para ser cubiertas por el sistema de oposiciones, de las cuales ha reservado una de ellas para personas transexuales.

La que me faltaba por ver, cuando ya creía que lo había visto casi todo.

Me digo yo dos cosas : la primera que la proporción de las personas transexuales no supone el 10 % de la población española, como parece querer reconocer la convocatoria, ni tampoco la Ley 4/2018 de las Cortes de Aragón que las fija en una proporción ( art. 27.3) “ no inferior al 1%” . Más bien pienso que el porcentaje después del cero y la coma, tiene varios ceros más, antes de fijar un número. Y la segunda, que nada impide a cualquier persona transexual, presentarse a una oposición ( y en este caso a la convocada), ganarla y ser respetado en el desempeño de su trabajo por nuestro ordenamiento jurídico, como por otra parte debe ser. Que yo sepa un transexual no es un discapacitado mental.

Esta DPH ya parece querer imitar al programa basura de TV5 Firts Dates, donde los invitados homosexuales y lesbianas, alcanzan un porcentaje del 10% del total de invitados y en algunos casos superior, cuando en la sociedad, ni de lejos se dan esas proporciones. Se habrán dicho desde la DPH, que a progresitas no nos gana nadie y del 1% de plazas que reserva la ley las vamos a alzar al 10% mientras apoyamos los planes de destrozar en nuestro Pirineo en Castanesa y negamos en cambo climático ( porque ha nevado este invierno) como dijera el baturro Lamban.

Y es que alguien o muchos “alguien” están empeñados en una batalla cultural por lo que llaman la luchas a favor de la minorías, las actitudes transgresoras y el individualismo más feroz con el fin acabar con los valores, la familia y los valores colectivos y sociales del hombre, fomentando el posmodernismo y su anexo, que no es otro más que el relativismo moral.

Estas actitudes son propias de una “ izquierda” que hace años perdió el norte y que, abducida por las elites globalistas, anda enfrascada en las luchas identitarias con el fin de distraer a los explotados- que siguen siendo los trabajadores de toda condición sexual y las clases más humildes de la sociedad- de su papel como sujeto revolucionario.

La derecha por su parte, en versión globalista y neoliberal Soros, se deja querer con todas estas políticas, sabiendo como sabe que esta izquierda batucada le hace el trabajo gratis. Así no resultó extraño que la citada Ley 4/2018 autonómica fuera aprobada por unanimidad en las Cortes de Aragón.

Esta problemática en que habita la izquierda conforme con el sistema, la ha reflejado muy bien dos autores, comunistas ambos, que nuevamente cito : Daniel Bernabé en su libro titulado : “la Trampa de la Diversidad” ; y Roberto Vaquero, más profundamente, en su obra : “ Resistencia y Lucha Contra el Posmodernismo”. De este último libro en el mes de julio de 2020 y con el título “ Un ensayo Para El Verano”, hube de publicar un artículo en este mismo diario.

Porque vamos a ver. Ciñéndonos al caso que nos ocupa ¿ acaso nuestros progresistas de la DPH han venido demostrando alguna inquietud por las capas más desfavorecidas y excluidas de nuestra sociedad ?

Más bien pienso que no. Ellos mismos, los 25 diputados que la gobiernan y sus partidos políticos suponen para la institución en sueldos ( contando dietas y seguridad social) sumas superiores a 1.500.000 euros año. La misma suma, por otra parte, con la que la misma institución decidió dotar al club de futbol de Huesca ciudad, para dos temporadas. No obstante lo expuesto, la DPH sólo consignó una partida en sus presupuestos de 2.000.000 de euros y unos cientos de miles para la construcción de viviendas sociales.

Ni qué decir tiene que la mayoría de los jóvenes siguen viviendo con sus padres, por lo bajo de sus salarios y lo elevado de las rentas de alquiler, en un país en el que llevamos más de 30 años sin construir viviendas de protección social.

Las cifras expuestas dicen mucho de unos partidos y diputados, que si bien nominalmente se dicen de izquierdas ( los de la mayoría de la institución) , hace muchos años que dejaron de serlo para sólo pensar en sus poltronas.

Que los cosas cambien o se transformen les da igual, ellos ya están bien. Pero necesitan disimular y seguirnos engañando con los derechos de las minorías y las identidades, para ocultarnos su nula voluntad por transformar las cosas en dirección a la justicia social y la supresión de las llamativas desigualdades que aquejan a nuestra sociedad.

Los transexuales, como todos nosotros, son seres humanos, dotados de los mismos derechos y deberes ( faltaría mas) y con derecho a ser respetados en su singular condición y dignidad. Por eso, seguro que andan tan necesitados como el resto de los españoles y los habitantes de nuestra provincia de viviendas sociales.

Pero ya hemos visto lo que les importa a estos señores de la DPH estos necesidades, si la comparamos con sus sueldos o el fútbol.

Para salir del paso ante tan graves contradicciones ideológicas, lo mejor por lo visto es disfrazarse de progre, reservando un 10% de las plazas de oposición pública a los transexuales.

Seguro que con estos comportamientos ya no engañan a nadie.