martes, 7 de septiembre de 2021

La difícil situación de una supermadre, llamada Beatriz Julián : ¿ cuántas no habrá como ella ?

En mi anterior artículo en este blog les había prometido unos comentarios en relación a la situación que vive Beatriz Julián y su hija afectada de una grave dolencia. Supe de su situación gracias a un artículo firmado por José Luis Pano en unos de los recientes números de una revista local, llamada La Alegría, que por cierto cada  día que pasa va mejorando.

Si de este articulo sacan la conclusión de que estoy indignado, así es.

Les pongo en antecedentes.

Beatriz Julián tuvo una niña y por falta de oxigeno en el parto quedó disminuida en muchas de sus funciones vitales, pasando la mayor parte del tiempo en una silla de ruedas y con 10 años que tiene, necesitando una atención de 24 horas. 

¿ A que no adivinan lo que  el hospital que la atendió le comunicó a la madre ?  Pues lo de siempre, que es la moda en la administración pública :  o sea, que se habían seguido todos los protocolos y ellos no eran los responsables.

Estoy de la petulante palabrita,  probablemente traducida del inglés,  -y que quiere decir procedimientos- hasta más arriba de la coronilla.  Y lo digo porque vivimos una época en que cualquier burócrata e irresponsable, te puede matar a ti y a toda tu familia, siguiendo a rajatabla el protocolo, que no es más que la salvaguarda de la responsabilidad del mal funcionario de turno. 

Váyanse enterando señores:  con el protocolo rígidamente cumplido si falta sentido común y vocación de servicio público, se pueden cometer negligencias catastróficas. Menos mal que en nuestro caso algún juzgado valiente atendió la reclamación de la madre y condenó al hospital, algo que no crean abunda en demasía.

¿ Y qué pasó después ? Pues pasó que nuestro flamante estado de derecho y social dice nuestra constitución ( aquí es cuando se escucha risas estruendosas) dentro de la aplicación de la Ley de Dependencia le otorgó a la madre, a la supermadre quiero decir, una asignación de 347 euros al mes para cuidar de su hija, más otros 500 al trimestre para equipos, pañales y tratamientos.

Para una atención de 24 horas a esta madre con todas las letras y a su pobre hija, lo concedido no llega ni a limosna. Y cualquiera podría pensar que nuestro estado anda escaso de fondos.

Se equivocan señores : hoy mismo se están poniendo en el mercado los bonos turísticos. Por lo visto, como con el Inserso había poco, y  como un jubilado o prejubilado por ejemplo con más de 2.000 euros/mes en 14 pagas, pasaba una semana o más en Torremolinos por 300 euros o menos, pensión completa, nos hemos inventado los bonos turísticos en nuestra comunidad autónoma a base de subvencionar a cualquiera, sea un pordiosero o el mas rico de la región, con un 30% su viaje y estancia turística regional hasta diciembre con el límite de 600 euros.


Esto mismo está ocurriendo estos días, en otras administraciones, en concreto las locales. En éstas,  todos los concejales de fiestas de nuestra provincia, están anunciado el programa de las No fiestas, es decir las fiestas, donde se tirará, con Covid o sin él, la casa por la ventana, porque el primer objetivo de los poderes, en todas las escalas que nos gobiernan, es mantener  al precio que sea las estructuras que permiten las desigualdades y las injusticias que nos rodean en perjuicio de muchos y beneficio de unos pocos, administrando para ello  opio social, embrutecimiento y   mal gusto ( ahora le llaman cínicamente cultura) al pueblo en forma de pan y circo constante.

Lo han conseguido. Somos una sociedad decante que mira hacia otro lado, indiferente total a situaciones de injusticia y dolor como la que sufre Beatriz y su hija, o como la que sufren los jóvenes sin casa con unos alquileres por las nubes,  o como la que soportan muchos  jóvenes que quiere hacer una FP y no tienen plaza.  Los valores supremos reinantes por todas partes son los el feroz e insolidario individualismo, el mal gusto, la degeneración moral, el embrutecimiento y el posmodernismo en todas sus facetas.

Beatriz ( y un servidor la apoyará  con todos los medios a su alcance, pues hay muchas como ellas) debe seguir denunciando la injusticia que está sufriendo, poniendo a esta sociedad hedonista y extravagante delante del espejo. A ver  si  de una vez se les cae a muchos de sus componentes la cara de vergüenza, o al menos toman conciencia de quién los manipula.

PD.- No he visto a muchos de los movimientos, que dicen apoyar a la mujeres en otros frentes, levantar la voz por Beatriz, su hija y todas las Beatriz que existen en España.



No hay comentarios:

Publicar un comentario