domingo, 24 de abril de 2022

Necesitan una nueva guerra y por eso están sacando del armario al Fascismo : la III guerra mundial más cerca de lo que muchos creen


 
La imagen  corresponde a una película rusa que está en You Tube y se titula "Tigre blanco". El film, de excelente calidad, puede seguirse con subtítulos en castellano y fue elaborado en 2012.

Lo he destacado al comienzo del artículo porque la tesis que defiende el film  de forma alegórica, es premonitoria y además de muy viva actualidad.

Un soldado soviético durante la II guerra mundial,  un tanquista, casi pierde la vida luchando contra otro tanque alemán Tiger, el cual se conduce siempre invisible, silencioso y letal para otros tanques soviéticos. Como un fantasma que aparece y desparece, nadie puede con él ; sus víctimas se cuentan por decenas entre otros tanques y soldados. El tanquista soviético, una vez recuperado de sus heridas,  dedica todo su tiempo a localizarlo y destruirlo a lo largo de todo el conflicto bélico. No es nada fácil  por su capacidad para camuflarse, esconderse y golpear. Pero por fin, en un enfrentamiento consigue dañarlo, aunque no destruirlo y el tanque fantasma alemán, dañado si, consigue huir.  Todo sucede cuando  es casi el fin de la II guerra mundial. Y cuando la guerra por fin acaba,  todos festejan la vitoria, pero el soldado tanquista no lo hace. Sigue preocupado y  les acaba confesando a sus jefes que el tanque asesino no ha sido destruido del todo, y por esa razón podrán pasar 30, 50 o 100 años, pero el tanque ( que no es mas que un símbolo) volverá.

Acaba esta excelente película con una conversación  entre Adolf Hitler, que todavía vive, y un oscuro personaje sin identificar. El Fhürer confiesa que todos harán recaer sobre él toda la responsabilidad de lo sucedido, cuando lo que ha ocurrido en realidad,  es que simplemente él sólo ha tenido la valentía de ejecutar todo lo que  Europa entera a la hora de la verdad quería y deseaba, es decir,  acabar con los judíos y  eliminar a  "ese ese país del Este, habitado por salvajes  y bárbaros", en referencia sin duda a Rusia. Finaliza Hilter diciendo que  "la guerra es el motor de la historia" y  que "tarde o temprano vendrán nuevos desarrollos".

Empiezo por el final. La civilizada Europa, paraíso de criminales, ha debido su crecimiento  y riqueza en los últimos siglos al saqueo de los países llamados del tercer mundo, a los que en muchos casos esclavizó y exterminó. Tenemos en el continente mal Karma. Nos repartimos África  en la conferencia de Berlín ( 1884, Rusia no participó) como vulgares piratas en la distribución del botín, y basta darse una vuelta por los museos de Berlín o el Británico en Londres, para darse cuenta de que nuestra habilidad en robar y saquear, eso sí, en nombre de la civilización, ha sido más que extraordinaria.

En Rusia, la misma civilizada Europa, siempre ha visto  un inmenso reserva de riquezas y una nación muy apetecible para sus intereses. El lugar perfecto para su expansionismo e imperialismo. Napoleón con la ayuda de alemanes y polacos ya la invadió (  siglos atrás, lo habían hecho estos últimos) : durante su guerra civil en 1918, varios países europeos con el pretexto de apoyar a a los rusos blancos, la volvieron a invadir ; y finalmente en 1941 entraron en Rusia rumanos, checos, eslovacos, croatas, italianos, austriacos, húngaros y alemanes ; amén de numeras divisiones formadas en los países ocupados por Alemania en Europa ; franceses ( División Carlo Magno), noruegos, belgas, holandeses, danenes, y hasta españoles ( División azul). En la maniobra, una vez iniciada colaboraron activamente  también los ucranianos occidentales, letones y lituanos.

Hoy mismo el capitalismo europeo y estadounidense se tambalea : inflación, crisis de sus divisas, euro y dólar, escasez de materias primas y encarecimiento de las mismas, endeudamientos asombrosos de sus economía, etc. Necesita nuevos mercados, nuevas fuentes de materias primas, y la extensión de Rusia proporcionaría todo esto, sería su salvavidas. Por eso llevan a años cercando a Rusia, por eso quieren la guerra. Tampoco van a permitir que la nación eslava renazca de sus cenizas, ni que China les dispute el cetro hegemónico mundial.

Bajo la apariencia de unas democracias civilizadas se esconde, se ha escondido en realidad durante muchos años el Fascismo, al cual están sacando de nuevo del armario, pues les va a resultar útil en su nueva cruzada imperialista. Lo necesitan para su nueva y agresiva guerra.

Después de la II guerra mundial el nazismo nunca se fue y habitó entre nosotros, si bien debidamente camuflado. Una mayoría de sus jerarcas fueron reconvertidos en la Alemania occidental, donde fue acogido entre otros nada más y nada menos que  el criminal  ucraniano Stephan Bandera, ideólogo  de los actuales nazis de Kiev. España misma dio acogida al criminal croata Ante Pavelic y hasta en el propio pueblo de quien suscribe estas líneas, algunos presumían hasta por escrito  y no hace mucho en  los diarios locales  de la ciudad, de haber recibido la visita del afamado nazi Otto Skorzeny en sus domicilios.

El fascismo después de señalar al nuevo enemigo ( antes fueron los judíos, hoy es Rusia y después será China), ya anda en la retaguardia preparando a la población y  suprimiendo libertades, con  el cierre de medios y otras actuaciones. Y a la par,  y a medida que se ha comenzado a expulsar a emigrantes ajenos a la civilización occidental, de buenas a primeras se están otorgando todo  tipo de permisos de residencia de la noche a la mañana, a numerosos refugiados ucranianos, tan altos, rubios y de ojos azules que son  muchos de ellos.

Europa camina derecha hacia el racismo y  el belicismo. Dentro de poco no sabrá qué hacer con su impagable deuda, y necesita otra guerra y un nuevo enemigo.

He contemplado un video de una de estas emigrantes ucranianas, lanzando su mensaje hace unos días en la Plaza Cataluña de Barcelona ( voy a intentar subirlo al Blog). Para ella, llena de odio es poco, no se ha conformado en su discurso con exterminar a Vladimir Putin y los militares rusos, no, ha pedido como ya hicieran los nazis, el exterminio de todo el pueblo ruso. Lo ha justificado en que los rusos no eran humanos, sino subhumanos ( untermenschen, decían los alemanes).

Cualquiera que dijera la mitad de lo que dijo la señora, ya estaría en España  procesado por un delito de odio. Pero en nuestra aparente democracia, se reserva la aplicación de este delito para cualquier manifestación antifascista.

El fascismo está aquí y como el tanque de la película, nunca se fue. Permaneció guardado  como un instrumento necesario del capitalismo para posibles y futuras contingencias.

Como ocurre en la película, llega un momento en que el oficial que manda al tanquista, a pesar de proclamarse comunista, le confiesa al soldado que él cree en el Infierno y el Diablo. Y eso se lo ha enseñado la guerra.

Quizá, como sentara Manes en sus trabajos, el Bien y el Mal existan y esta dualidad rija nuestras vidas y las de la humanidad.

En nuestra degenerada, posmoderna y descreída Europa, pasto de todos los vicios y muy pocas virtudes, tal como dijera Baudelaire " el mayor triunfo del Diablo es que los humanos dejen de creer en él".

Nadie en Europa ( o muy pocos) se aperciben de la llegada del Fascismo y el camino de destrucción y guerra que nos tiene reservado. 

Cuando nos demos cuenta quizá sea demasiado tarde. La III guerra mundial está más cerca de lo que muchos creen.


PD.- La hidra fascista nunca fue destruida. Tengo un pariente que durante los años sesenta del pasado siglo, viajó muy a menudo a Letonia y Ucrania por razones profesionales. Ya entonces y con ambos países dentro de la URSS, se quedó asustado de la cantidad de  nazis que había en ambas nacionalidades, muchos de los cuales no tenían  ningún empacho  en confesarle su ideología en privado.
 



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