Ferrovial, una de las mayores constructoras de España, se va. Pretende trasladar su sede social a Holanda, otro país de la UE. El gobierno, que tantas facilidades de todo tipo le ha venido dando - como todos los anteriores gobiernos- en estos últimos 15 años o más, anda poniendo el grito en el cielo, y los medios de comunicación- perdón las furcias mediáticas- aún insisten en que es su responsabilidad porque se le tendrían que haber dado más ventajas y ayudas fiscales.
En estos últimos tiempos, numerosas y muy abundantes han sido las concesiones de obra pública y ayudas, por parte del estado a esta compañía constructora, como numerosos también han sido los escándalos por sospechas de corrupción en las adjudicaciones de obra pública concedida. No es cuestión de enumerar. Solo citaré el caso Palau en Cataluña, donde dos de sus directivos quedaron finalmente absueltos por prescripción del delito, figura esta que en nuestros tribunales se aplica con demasiada frecuencia en determinados casos. Si perteneces al Ibex 35, y cotizas en bolsa, tienes desde luego bastantes más posibilidades que un españolito de pie, de que te toque esta lotería jurídica, que exime de responsabilidad penal.
Otro caso más de Ferrovial, y acabo : actualmente en Polonia, nuestra patriótica compañía mercantil anda en la palestra con otro nuevo escandalo, por sobornos y otras lindezas de su filial en el país.
Personalmente siempre tuve de esta constructora la peor de las opiniones, en especial a raíz de sostener hace años frente a ella un litigo en mi calidad de administrador concursal. No voy a dar detalles, pero sí diré que vi cosas muy extrañas en las contestaciones a las aclaraciones que por el juzgado fueron solicitadas al Ministerio de Fomento, así como en las pruebas periciales practicadas en el juicio, y ahí lo dejo.
¿ Pero de qué se asombra nuestro gobierno en estos estos días? ¿ De que Ferrovial no tenga patria y los españoles, salvo para exprimirnos como un limón, le importemos un comino ? ¿ Se asombra acaso el gobierno ( y la oposición que es lo mismo), de que en la pútrida UE, de la que ya estamos tardando en irnos, Holanda sea un paraíso fiscal y Luxemburgo otro, sin perjuicio de que numerosos diputados del Parlamento Europeo estén coimeados ?
Lo chistoso del asunto, o bien triste según se mire, es que el resto de las grandes constructoras andan estos días lanzando notas de prensa reivindicando el buen nombre de Ferrovial y poco menos que anunciando acciones judiciales ante los tribunales. Desde luego ya saben, y que muy bien, donde acudir. Y ahí lo dejo otra vez.
Unos pocos, nuestra oligarquía y parte de algunos funcionarios y políticos como sus cómplices, llevan siglos saqueando al estado y representado los intereses extranjeros ¿ De qué nos extrañamos pues?. En tiempos del general Franco y durante la II guerra mundial, los británicos tenían sobornados a una parte muy importante de nuestros capitanes generales ; probablemente lo mismo sucedió en 1898 con ocasión de la Guerra de Cuba y Filipinas con el consejo de ministros de España y algunos otros militares. Sobre esto y las últimas investigaciones históricas escribiré en breve un articulo en el blog. ¿ De qué nos vamos a extrañar si Carlos IV y su hijo, el canalla de Fernando VII, cedieron el trono de España a Napoleón a cambio de unas rentas y algún que otro castillo con coto de caza incluido ?
Esta oligarquía es la que acabará de hundir a España, pues a nadie se le ha ocurrido- ni se le ocurrirá- decirle a Ferrovial que sí, que se puede ir donde quiera, pero que no recibirá del estado español en lo sucesivo ni la concesión para arreglar las aceras de Tomelloso, y de paso fundar una compañía nacional de construcción que a buen seguro nos saldrá mas barata.
Tengo un conocido, pequeño empresario de la construcción, que ha recibido y recibe muchos encargos de las grandes constructoras. Por sistema las rechaza todas y prefiere mantener una atomizada y pequeña clientela. Contratar con esta gente, es cobrar tarde y mal me dice, y seguramente con rebaja y penalización sobre el precio pactado, amparada en cualquier " anomalía" técnica detectada. Son legión los perjudicados por estos sistemas de abuso.
Lo que más pena me da, después de todo, es que a Ferrovial y las grandes constructoras los acabarán defendiendo muchos y pequeños empresarios, cuando en realidad, como sucediera con Isolux por ejemplo son sus mayores enemigos.
Repetirán como loros, tal como les indican nuestras furcias mediáticas, que " nos estamos dejando perder a nuestras mejores empresas" a pesar de que ellos nunca recibirán, a pesar de madrugar y trabajar como brutos, ni una milésima parte de las ayudas que ha recibido Ferrovial y otras compañías del mismo sector.
Como dice un conocido informador, los gigantes lo son porque los miramos de rodillas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario