Zelensky : cría cuervos.

Vi  a Zelensky  en televisión, gesticulando con todo tipo de muecas en el rostro mientras hablaba, mejor dicho, amenazaba. Su cara reflejaba sufrimiento  a la par que odio y los movimientos de su faz no se acompasaban con el habla : eran automáticos, separados, producidos por un resorte  que sólo ciertas drogas dejan en la personalidad y el sistema nervioso.

El sujeto, como he referido, amenazaba a la dirigencia de Moscú con todo  tipo de males en lo personal, y lo hacia después de haber atacado el Kremlin con dos misiles que pronto fueron derribados, sin evaluar que Rusia, si quisiera, en dos minutos apretando el botón no dejaría un edificio administrativo  en pie en toda Kiev. 

El " mito" Zelenky ( para la prensa basura, claro), lleva camino de convertirse en un problema para toda Europa y hasta quizá, los Estados Unidos, sin bien estos últimos cuando no lo necesiten, lo eliminaran sin más contemplaciones si les resulta molesto.

En su gira Europea pasando el platillo en todas las naciones palanganeras del imperio, recaló en el Vaticano, y tan educado y soberbio él, antes de ser recibido por el Papa lo recibió sentado, añadiendo a la salida de la entrevista, " que Ucrania no necesitaba intermediarios". Lo que se dice un hombre bien educado. Eso mismo es lo que, seguramente le dirá a su patrocinador principal, con más de 120.000 millones de dólares de ayuda, cuando le ordene firmar la paz. A ver si se atreve.

Está loco y totalmente ido el títere nazi ucraniano. Es una animal sin control y por tanto cada día mas peligroso. Ya recientemente se ha permitido el lujo de amenazar a sus  patrocinadores europeos, que al al contrario que los estadounidenses solo le han transferido 40.000 millones de euros, diciendo uno de sus asesores directos " que, o se incrementan las ayudas, o Europa no será un lugar seguro en sus restaurantes o cafés.".  O sea, nos ha amenazado a todos nosotros.

De terrorismo sabe bastante el títere comediante. Ya lleva asesinados dos periodistas rusos y a la hija ( Daria), del intelectual Alexander Duguin. En su casa, quien le molesta simplemente desaparece, y ya ha eliminado a 12 partidos políticos, encarcelado a todos los opositores y cerrado la gran mayoría de los canales de televisión.

Algunos han criado al cuervo, ahora a esperar a ver  si nos saca los ojos.