Voy a ser breve. Dicen que vivimos en democracia, y que la nuestra es homologable con la de los países de nuestro entorno. Yo no lo veo así : en las democracias, la policía no toma partido, es profesional. Cumple con sus deberes señalados en el ordenamiento jurídico y punto. Por consiguiente, no debe ser despedida de sus cuarteles, cuando va a reprimir a ciudadanos, que son sus nacionales, con el grito de guerra de " A por ellos". Vale el grito para los enemigos extranjeros, nunca para su propio pueblo, piense como piense. Ni tampoco cuando entona en algunos autobuses ese mismo grito guerrero al ser trasladada al lugar del conflicto, entre canción y canción. Menos todavía, cuando ya fuera de servicio, alguno de sus miembros, participa en incidentes violentos amenazando y pegando a otras personas por el hecho de pensar diferente a ellos ; tampoco cuando otros policías, armados hasta los dientes, se fotografían en las redes con el lema de " hablamos", contestando así a la invitación de líderes independentistas al dialogo, con el tiempo de verbo en catalán " parlem".
Tampoco es democrático y menos al servicio del pueblo- como deben estar las fuerza armadas- si ciertos soldados dejan a ciertos tipos subirse a un tanque del ejército español, y desde él, proferir amenazas- señalando su potencia de fuego- contra líderes políticos independentistas y no independentistas.
Y para finalizar ( habría muchos más ejemplos, pero aquí me detengo), tampoco es democrático que un Fiscal titule sus archivos de la redacción de una querella contra líderes independentistas, antes de ser presentada en la Audiencia Nacional, con el distintivo de " más grande será la caída".
Ya me dirán ustedes en qué democracia sucede esto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario